Ricardo Espiau Zenza Bronica

Estoy perdido

Ricardo Espiau Aula de Fotografía, Blearn, formación, Tutorial

Hace un tiempo que Nacho me contó por Facebook  que había perdido el ánimo por la fotografía. Convirtió sus ganas de amar la fotografía en preguntas. Fueron unas preguntas tan elaboradas que decidí que debía darle una respuesta acorde. Me demostró que realmente tiene ganas de saber como salir de la espiral en la que se encuentra y volver a tener ganas de hacer fotos.

Os invito a echarle un vistazo:

N: Te escribo porque últimamente me encuentro un poco desanimado con la fotografía. Últimamente he hecho algunas fotos, pero ya no es como antes, quizás porque no consigo hacer fotos “obras de arte” (jajajaja a lo que todos aspiramos) y claro tampoco sé qué mejorar porque la autocritica es difícil. Quería saber si me podrías dar algún consejo para seguir adelante.

R: Antes de todo, me gustaría preguntarte un par de cosas:

La primera es saber ¿Por qué la fotografía? ¿Que te movía al principio para comprarte una cámara y para lanzarte a este mundo?

«Saber qué te mueve o por qué empezaste es fundamental»

 

La segunda, saber si has leído algo de lo que tengo en el blog, sobre todo porque son artículos que te pueden ayudar con lo que me planteas.
Tengo un par de artículos que cambian radicalmente la manera de pensar y afrontar la fotografía.
Uno es la evolución del fotógrafo y otro es la creatividad no viene sola
Por un lado son artículos que abren los ojos a la gente para darse cuenta de que lo que hoy te llama la atención, mañana ya no es tan interesante y por eso termina cansando. Por otro lado son algo inspiradores para animar a trabajar y encontrar ese sentimiento de ganas imparable que tenias al principio

N: Mi afición por la fotografía nació gracias a mi hermano que se compró una cámara. A él le apasionaba y cuando me la dejaba, ver aquellas fotos en una calidad óptima me llamaba más la atención aún. Me encantaba ese efecto de desenfoque del fondo que se conseguía con una cámara en condiciones. En cuanto pude ahorrar, me hice con la mía.
En cuanto a la evolución del fotógrafo, me encuentro en la etapa de: “apesto, estoy en la mierda”. Ya pasé mis etapas de ego máximo cuando conseguí ese efecto “tan bonito” de desenfoque y la etapa de obsesión por el equipo.
Es verdad que, al principio, me obsesioné mucho por aprender los aspectos técnicos de la cámara, no me había comprado una cámara réflex para tenerla en modo automático, de eso estaba seguro. Aprendí a usarla. Pero como dices, aprendí primero técnica y nada de ojo artístico.
La composición llamó a mi puerta cuando me di cuenta que tenía que hacer fotos mejores. Me conozco la reglas de composición perfectamente, pero ¿y ahora qué? No sé aplicarlas y ni analizarlas para hacer una foto cuya duración es tan corta. Sé que es necesaria la práctica, pero, ¿quién critica mi foto?¿qué me motiva a empezar a practicar? Este es mi principal problema.

«¿Quién critica mis fotos?¿Qué me motiva a empezar a practicar?»

 

R: Me preguntas que quién critica tus fotos, ¡Pues tu mismo! Solo tienes que buscarte tus propios criterios de análisis y autocrítica.
Un comienzo siempre suele ser uno muy sencillo que es mirar las fotos sin pensar que las has hecho tu mismo. Esto es, revisionar tus fotos dejando de lado todo el ambiente que no sale en la foto y que todavía está en tu cabeza de cuando la hiciste. Este ambiente, este contexto que queda fuera para una persona ajena, puede hacer que mitifiques una fotografía que no merece la pena. Igualmente puede hacer que la deseches siendo una foto buena porque te recuerde a algo que no te gusta. Así, dejar de lado eso va a hacer que tu crítica sobre la foto sea algo más objetiva. Una forma sencilla de llevar esto a cabo es editar o revisionar las fotos varios días después de hacerlas.
Otra manera de hacer cierta criba sobre tus propias fotos es, darles un segundo de vida, mirarlas durante un segundo y pasar a otra, así hasta el final. Luego las que más recuerdes son las que probablemente llamen más la atención visualmente.
Someterlas a criticas ajenas también es útil pero debes conocer quien las critica y no debes entrar en batallas de convencimiento de lo que piensas de tu propia foto con un tercero. Puedes ponerlas en un grupo de fotografía con ánimo de que la gente te dé su opinión. Cuando alguien lo haga, no des credibilidad a esta persona hasta haber estudiado su perfil y ver en qué te puede ayudar su crítica. Es algo que he usado mucho y por lo general la gente suele opinar muy gratuitamente. Cuando ponía un retrato, me fijaba solo en aquellas críticas que venían de gente que se dedicaba a hacer retratos y que tenían un porfolio que en cierta manera era de mi gusto. Cuando veía una crítica de alguien ajeno a la fotografía, me quedaba con lo que me podía ser útil. Es un estudio elaborado, puedes sacar mucha información, desde gustos sociales hasta una información con aplicaciones comerciales por las opiniones de la gente. Dentro de un perfil de persona ajena a la fotografía, todo lo que es un autorretrato, algo que cuente de ti, de tu vida, gusta más que las cosas más artísticas y elaboradas. A la gente le pirran los paisajes y a mi me aburren… Si además las críticas están fundamentadas y desarrolladas pues mucho mejor.

En cuanto a lo de saberte las reglas perfectamente está muy bien pero tienes que convertirlas en triviales, tienen que estar en tu ojo siempre, tengas la cámara o no encima. Puede parecer exagerado pero es la única manera de hacer que las uses de manera natural, sin forzarlas y que las uses en beneficio de la parte artística. Hay muchas cosas en composición que no tenemos en cuenta, líneas, formas geométricas, patrones, colores… y no solo en lo que es físico y palpable, también en la luz y sombras hay composición. No solo se compone con objetos, también puedes hacerlo con la luz.
¿Lo tienes todo tan interiorizado como para hacerlo de manera natural?

«¿Usas las reglas o solo te las sabes? ¡JUEGA!»

Comparte este artículo

N: Respecto a la fotografía de viajes, las típicas, las odio. Incluso cuando mis amigos me dicen que les gustan pienso que no me gustan, no me convencen nada. Siempre que voy de viaje, intento sacar algo distinto, gente que haga mi foto diferente aunque nunca sabré cómo enfrentarme a no sentirme un acosador. El tipo de fotos que menos me gusta son aquellas posadas típicas de las redes sociales en las que todos salimos siempre iguales y que “solo” sirven para el mero recuerdo.

R: Tu intención frente a la fotografía de viaje es buena, muy buena, ya estás en el siguiente paso. Lo que hay que hacer ahora es cambiar la visión que tienes en general de la fotografía callejera.

En Sevilla no sales a hacerle fotos a la Giralda, pues en viajes tampoco salgas a por los monumentos. Como digo en el post de fotografía EN viajes y no de viajes, dale un valor especial a lo social, a la gente. Acostúmbrate a buscar elementos compositivos diferentes que te ayuden a darle un valor extra a la fotografía. No solo los tercios o la mirada son técnicas compositivas útiles. Romper patrones de formas o de color. Romper líneas o continuarlas, enmarcado o componer con las sombras son métodos mucho más sofisticados dentro de la sencillez. Úsalos y de nuevo, trivialízalos, que los veas hasta cuando no llevas la cámara.

 

N: En cuanto a mi creatividad, CERO. No sé si es porque soy un chico de ciencias. Me encanta observar a la gente, ver cómo se comportan y qué pasa a mi alrededor, pero no veo el momento para hacer una foto.
Por otra parte, me falta inspiración y no sé si coger esa inspiración de otros fotógrafos es una buena idea.
Lo que más siento ahora es frustración porque mi poca paciencia no me permite conseguir buenos resultados, los quiero ¡YA!.

R: La creatividad, ese amigo que nos sentamos a esperar durante mucho tiempo sin ir a buscarlo. Ese es el problema. Nos escudamos en el “no soy nada creativo” pero quieres serlo. Si quieres serlo, ¿por qué no lo entrenas?¿Qué mito es ese de que hay personas creativas y otras que no? La creatividad no viene sola es un artículo muy esclarecedor en este aspecto. Ahí vas a poder leer lo que nos pasa y como poder ponerle solución. Y esto, lo puede hacer todo el mundo. El que me diga que no es creativo, es porque no quiere serlo. Lo siento pero es así, no te autoengañes.

«La creatividad, ese amigo que nos sentamos a esperar sin ir a buscarlo»

 

La inspiración la puedes coger de muchos sitios, de otros artistas, no solo fotógrafos, de cine, series, videoclips, ANUNCIOS y no solo los de la tele, marquesinas, periódicos, revistas, libros. Señor, con la facilidad de información al alcance de un clic, ¿me vas a decir que no te viene la inspiración? Lo que no se puede pretender es crear algo nuevo y fantástico sentado en el sofá y luego gritar EUREKA.

Comparte este artículo

N: Otra cosa que mencionas en tus post y con la que estoy de acuerdo, es con lo de que me llamen “loco”. En ocasiones suelo ser pesado con la gente para que pose de una forma u otra, ellos no están acostumbrados y de primera ya dicen que no les gustan los resultados. Cuando me pasa eso, no sé que hacer.

R: Lo que me cuentas de que la gente cuando le haces fotos no se gusta y me preguntas qué hacer, no soy yo el que tiene la respuesta. Precisamente practicar con gente conocida tiene una ventaja brutal. La confianza. Gracias a esta confianza te van a dar una opinión totalmente sincera por su parte y esta confianza te da la facilidad de preguntarle qué es lo que le gusta de la foto y lo que no le gusta. La respuesta está en ellos, no puedo darte unas pautas generales que sirvan para todo el mundo. Ahora sí, te puedo decir qué he aprendido yo de hacerle fotografía a los amigos. En lo que todo el mundo coincide es en que le gustan las fotografías donde hay algo que ellos no pueden obtener, ya sea por desconocimiento técnico o porque no tienen material para ello. Por ejemplo, la gente FLIPA, literalmente, con las fotos a contra luz. ¿Por qué? Pues porque la gente no sabe hacerlas y como usan las cámaras en automático no son capaces de sacarle partido a esto. Así de sencillo. Algo que ellos no pueden obtener.

«Confía en ti. Convéncelos de que confíen en ti»

 

Además veo que sientes la típica presión que sentimos todos los fotógrafos cuando hacemos fotos en una sesión a alguien o sin sesión a unos amigos. Si estás seguro de tu trabajo, tienes que convencer a tu modelo de que confíe en ti. Tú eres el que tiene los conocimientos para hacerlo bien y tiene que confiar en ti. Tu eres el que hace un estudio de la persona y analizas como colocarla para sacarla bien. Tienes tu estilo y amenos que sea un modelo profesional, tu criterio probablemente sea mejor que el de tu cliente. Sin embargo siempre está bien escucharlos y consentir ciertas cosas porque puedes aprender mucho de ello. Imagínate que me viene un cliente que me dice que le gustan mis fotos mucho pero luego en la sesión me pone problemas para posar como yo suelo hacer posar a la gente o me da sugerencias sobre localizaciones cuya iluminación o composición no es adecuada. Si le hago caso no obtendrá las fotos que vio y por las que me ha contratado. Convéncele que confíe en ti. 

N: En cuanto a los estilos que más me gustan son el retrato (sesiones fotográficas), que por cierto, he visto tus trabajos y son una pasada; y la fotografía callejera (junto con el pudor por el “me están viendo” y que me echa atrás).

R: Tus estilos, retrato y fotografía callejera. Para mí lo más divertidos.

En el retrato te aconsejo que practiques mucho. Veras cosas que funcionan y otras que no. Olvídate de hacer retratos sencillos, da una vuelta de tuerca y dale caña a la cabeza. Analiza como funcionan las miradas, la iluminación para los volúmenes, aprende a hacer posar y apréndelo todo practicando y analizando las fotos. Pregúntate si funcionan o si no. ¿Le gustan al modelo? ¿Hiciste previamente un trabajo de preparación de la sesión? ¿Se parece a la idea que tenías en la cabeza?¿En qué has fallado?¿La edición es apropiada?

Respecto a la fotografía callejera, tienes muchas pautas ya que puedes seguir, que no te dé tanto miedo la gente y busca lo diferente.

Hazte siempre estas preguntas antes de salir a la calle con la cámara: ¿Sales a encontrar fotos o sales a crearlas?¿Buscas lo que fotografiar o te sientas a esperar que pase algo y que te coja con la cámara preparada?¿Qué probabilidad hay de que pase eso? CREA TU.

«Sales a encontrar fotos o a crearlas?»

 

Trabaja una escena, donde veas que hay posibilidades de hacer una fotografía, busca la manera de poder exprimir la situación, la luz que hay o las personas que pasan y pasarán por allí.

Juegos como usar un focal fijo, buscar cada día fotos sobre el mismo tema o usar siempre un elemento compositivo concreto en tu toma, son formas de no sentarte a esperar que pase algo que puede que no pase nunca. Ese “instante decisivo” tan utópico.

El uso de la fotografía analógica también es un ejercicio muy útil en este aspecto, te evita el disparo indiscriminado de fotografías puesto que te vale dinero cada clic. Esto te hace buscar con más decisión y preparar cada fotografía mucho para asegurarte un disparo certero. Según la cámara incluso iremos a ciegas, lo cual nos hace aprender más técnica o también podemos usar visores indirectos que nos “ocultan” frente a las personas a las que hacerles fotos.

Como habréis visto, la mayoría de los consejos nacen de un estudio de tus propias fotografías y de hacerte preguntas concretas para cuestionar tu trabajo. Espero que al igual que para Nacho, para los demás, sus dudas y mis respuestas os hayan servido de algo. Sobre todo para daros cuenta que cuestionaros es bueno y se puede sacar mucho partido de ello.

Os invito a todos a contarme vuestros problemas sobre estos temas y a buscar entre todos soluciones a los mismos. ¡Te espero en los comentarios!

[x_subscribe form=»612″]